Un dia desperté y no logré encontrar mi imagen. No estaba, ni allí, ni aquí, ni donde la buscara. Mi imagen habia desaparecido.
Busqué a mi amigo de la infancia, no lo pude encontrar. Me vestí y sali hacia la calle, la gente parecia normal, iba y venia, hacian su vida pero nadie me escuchaba. Parecia que nunca hubiera estado presente. Entonces corrí a la casa de mis padres, ellos me recibieron con amor y sólo se me ocurrio preguntarles:
- ¿Dónde se han ido los espejos, quién me los a quitado?
Ellos me miraron con su mirada sabia y sonrieron diciendo:
Espejos ¿ Qué es eso hija? ¿De dónde has sacado esa palabra?...
Volví a casa sorprendida, decidí no salir por el resto del dia.
Nadie me entiende, a pasado largo tiempo y cuando quiero hablar del tema, todos me toman por loca.
Lo unico que desearia saber es donde ha quedado mi entrañable espejo, auqel que reflejaba mi imagen, mostraba mi estado de ánimo, reflejaba mi vida entera.
Hoy desperte y volví a buscarlo una vez más. No lo encontré. Me dirigí hacia el almacén a hacer las compras, al entrar por la puerta de vidrio vi que algo se reflejaba, entonces me detuve. De repente la elegria me invadió, allí estaba lo que había esperado tanto tiempo, mi imagen, esa, en el vidrio, era yo, allí estaba mi espejo, mi retrato, al final lo había encontrado.
Al final, mi vida había controlado, por fin recordé quién era.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Un dia desperó no encontró su imagen en el espejo, preguntó a todos, se reian, se trataba que el tiempo había pasado sin drace cuentas, por las cosas cotidianas de todos los días, era una adolecente con su sonrisa radiante.
ResponderEliminarSe dio cuenta que era ella misma.